Los resultados muestran que la calidad del aire hipóxico durante el entrenamiento modifica la respuesta fisiológica: un ambiente más extremo potencia adaptaciones neurales (+fuerza), pero limita la hipertrofia (+músculo). Controlar el entorno es clave al simular hipoxia. #HILOTESIS
Y encontramos al responsable de todo esto... EL CO₂. Los niveles de CO₂ y humedad relativa fueron significativamente más altos en la tienda (NHTent) comparado con la sala.
Y sobre todo, el efecto que tiene sobre las ganancias de fuerza.
Llevamos a cabo un estudio con 24 hombres entrenados expuestos a hipoxia intermitente (FiO₂ 15.9%) en tienda o sala, para analizar cómo cada método influye a nivel físico, funcional y perceptivo tras un programa de fuerza.