Las hipótesis del derrumbe en Madrid y el espejo de Chamberí hace siete años: un exceso de material de obra bajo sospecha
La acumulación de elementos en la última planta del edificio en calle Hileras es una de las opciones que se barajan, pero no la única. En 2018, esta teoría tomó fuerza tras el colapso de otro inmueble que dejó a dos personas sepultadas bajo los escombros. El Ayuntamiento pide prudencia: no hay nada confirmado
El edificio derrumbado en el centro de Madrid era rehabilitado para abrir un hotel de cuatro estrellas con inversión saudí
Dambéle, Alfa, Jorge y Laura. Son los nombres de los cuatro fallecidos en el derrumbe de un edificio en pleno centro de Madrid. Pero si en vez de desplomarse una cuarta parte del suelo lo hubiera hecho toda la superficie de la última planta, nadie garantiza que hubiera supervivientes. “Podría haber sido una tragedia mucho mayor”, confiesa al día siguiente el alcalde de Madrid, José Luis Martínes-Almeida, que durante el siniestro se encontraba en Londres (Reino Unido) y suspendió la visita para volver a la capital. En el momento de los hechos, el martes a media mañana, unas 40 personas trabajaban en el edificio. Y ahora los esfuerzos se concentran en resolver qué pasó en el número 4 de la calle Hileras o, sobre todo, hasta qué punto pudo haberse evitado.
Esta mañana, casi 24 horas después del siniestro, el propio Almeida confirmó ante preguntas de los periodistas que el material de obra acumulado en la sexta y última planta es una de las hipótesis que se manejan, aunque no la única. El regidor se ha mostrado prudente y ha pedido esperar a que concluya la investigación, que al tratarse de un accidente laboral queda a cargo de la Policía Municipal y no de la Nacional. “Es obvio que había y eso pudo influir, pero no estoy en condiciones de afirmarlo”, determinó el alcalde. Desde la Comunidad de Madrid mantienen la misma línea.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García, se ha referido también a la hipótesis de la acumulación de elementos en la zona superior aunque ha aclarado que “no es la única” opción que se baraja. “Hay que esperar para saberlo con exactitud”, declaró ante los medios. Sin embargo, existen paralelismos evidentes entre este y otro sonado derrumbe que hace siete años también contuvo la respiración en la capital.
Similitudes con el colapso de otro edificio en obras
El colapso en mayo de 2018 de otro edificio en obras en el número 19 de la calle General Martínez Campos (Chamberí) guarda importantes similitudes con este último siniestro. El inmueble era propiedad de la familia Rockefeller y en sus ruinas se encontró sin vida a otros dos operarios. Desde el primer momento, como ha ocurrido con Hileras 4, las hipótesis entre los rescatistas apuntaron a un exceso de material acumulado en la última planta y la infraestructura terminó siendo demolida.
El edificio que se derrumbó este miércoles tenía una inspección técnica “desfavorable”, fechada el 8 de marzo de 2022, relativa al “estado general” de “fachadas, exteriores y medianeras”, así como de la “conservación de cubiertas y azoteas”. No obstante, tanto el alcalde como el responsable de la empresa Anka Demoliciones (a cargo de los trabajos), Daniel Anca, aseguraron que todas las licencias para la remodelación estaban en regla desde febrero de este año.
Más allá de cargos institucionales, el jefe de Guardia de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, Miguel Seguí, ha dado algunos detalles de lo ocurrido este miércoles desde el lugar de los hechos. Seguí ha explicado que el colapso del forjado en la terraza fue clave en el derrumbe de Ópera, lo que arrasó con el resto de la estructura hasta el sótano. Es decir, fue de arriba a abajo. Poco después del siniestro tuvieron que asegurar la zona de intervención, ante la expectativa de que hubiera nuevos desprendimientos. En en lugar de los hechos pudo verse a varios efectivos del dispositivo de emergencia sacando varios palés de obra del interior del edificio.
Sin embargo, tampoco desde el Cuerpo de Bomberos se atreven a aventurar una causa clara que explique lo ocurrido. “Es una suma de factores. Estaban trabajando sobre una estructura antigua, retirando tabiques y modificando cargas”, ha relatado Seguí. Los edificios colindantes parecen haber quedado fuera de peligro e incluso esta noche ya durmieron en sus casas los habitantes de la calle Hileras.